mayo 09, 2012

El pájaro del alma

"Hondo, muy hondo, dentro del cuerpo habita el alma. Nadie la ha visto nunca pero todos saben que existe… Dentro del alma, en su centro, está, de pie, sobre una sola pata, un pájaro: el Pájaro del Alma." (Inicio del libro El pájaro del alma  de Mijal Snunit. FCE, 1993)


La primera vez que tuve este libro entre mis manos fue en 2009. Pablo tenía dos años y medio; le leía todas las noches un cuento, un poema o narrábamos entre los dos las ilustraciones.


Un día le leí este cuento, a pesar de ser largo lo escuchó atento. A la noche siguiente quiso volver a escucharlo. Siempre me ha parecido que le gusta satisfacer su necesidad de entender algo hasta la comprensión (no es que sea un rasgo distintivo, es como dice Piaget parte del desarrollo cognitivo: la asimilación).


Días después de haber leído el cuento, tuvimos, Pablo y yo, un "encuentro cercano del tercer tipo" (así le llamo a esos sucesos desafortunados en los que se conjugan una mamá con poca paciencia y un niño haciendo cosas de niño: renegar por la comida, tirar el agua, tardar horas masticando...-escriba aquí lo que se le ocurra-). En dicho encuentro elevé la voz, grité, vociferé e imagino que lucí como una bruja salida de un cuento. Cuando la tormenta de desborde emocional pasó, Pablo dijo: "Mamá, ¿qué hace el pájaro del alma cuando se siente apachurrado?". Sobra decir que mis ojos se llenaron de lágrimas y que, a como pude, recogí los pedazos de alma y corazón partidos por el dolor causado a mi hijo.


Entonces tuve oportunidad de explicarle a Pablo lo que sentía. También tomé la decisión de escribir un diario para él, para poder describir cómo me siento con las decisiones que tomo, para que cuando sea grande pueda leer el torrente emocional que estoy viviendo y que a esta edad no puede entender, pero que de adulto comprenderá y podrá colocar las piezas del rompecabezas de recuerdos y emociones que tenga en su historia de vida.


¡Gracias Snunit por escribir este cuento para poder describir de manera concreta las emociones!
 


dfcg

3 comentarios:

  1. Me es muy difícil entender y concientizarme que mi estado emocional afecta directamente a una de mis dos hijas, me siento desnuda cuando veo en ella la manifestación de lo que estoy sintiendo yo.

    Sigo esta recomendación de lectura para mí y para mis hijas.

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  2. Es una lectura que acaba por ser referencia cotidiana con los niños, en lo que se refiere a emociones.
    También uno de mis hijos me hizo una pregunta inquietante a propósito de ese libro: -Mamá si "nunca ha nacido un hombre sin alma" ¿para qué existe la palabra desalmado?-

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  3. Qué hermoso relato, me has hecho llorar con él, al recordar que muchas veces no somos conscientes de que lastimamos a nuestros hijos por nuestro cansancio, prisa o cualquier otra cosa que en esos momentos ocupe nuestra mente. Trataré de conseguir el libro.
    ¡Un fuerte abrazo!

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